Skip to content

La nueva normalidad en los colegios

 

La nueva normalidad en los colegios. Seguridad en las aulas el próximo curso.

 

Colegio Nuestra Señora Santa María.

 

Ante la incertidumbre sobre el comienzo del curso escolar 2020-2021, en el Colegio Nuestra Señora Santa María estamos adoptando una serie de medidas que garanticen, en lo posible, el buen funcionamiento de las actividades escolares.

Nuestro primer objetivo, y el más importante, es garantizar la salud y el bienestar de todos los estamentos colegiales: alumnos, profesores, personal no docente…

El segundo objetivo (supeditado, naturalmente, al primero) es tratar de que el ritmo académico de los alumnos se vea afectado lo menos posible para que su aprendizaje no sufra más de lo necesario.

Y en tercer lugar, queremos que las familias vean su rutina alterada también lo menos posible: esto es absolutamente crucial para los padres de los alumnos más pequeños, para los que el hecho de que sus hijos estén seguros y cuidados en los colegios es fundamental por la libertad que les proporciona.

Necesitamos lograr estos tres objetivos, además, sometidos a las restricciones que la Administración disponga, y con las que no siempre estamos de acuerdo por más que tengamos que seguirlas.

La seguridad de toda la comunidad educativa requiere adoptar medidas de higiene en la línea de las que propone la Administración y garantizar su cumplimiento estricto.

Esto involucra, por un lado, el distanciamiento entre alumnos, que plantea un problema de espacios en todos los colegios y que cada uno tendrá que resolver según sus propias circunstancias. En este sentido, nosotros nos proponemos resolver la dificultad adaptando la ocupación de todas las instalaciones a los diferentes escenarios posibles. Dependemos de las decisiones que las autoridades educativas y sanitarias adopten en el momento mismo del inicio del curso: asistencia normal, restricciones en el número de alumnos o espacio entre ellos, y enseñanza íntegramente a distancia.

Cualesquiera que sean las circunstancias, es inevitable y crucial la desinfección y limpieza cuidadosas y constantes de superficies, aulas, pasillos, baños… Todo esto ha de llevarse a cabo extremando la atención y aumentando las horas que el personal de limpieza dedica al mantenimiento de todos los espacios compartidos, así como despachos, seminarios, laboratorios, etc.

De producirse una asistencia a los colegios con restricciones de número o distancia, algo que puede suceder o bien desde el inicio del curso o bien ante la aparición de rebrotes en otoño o invierno, la prioridad en la enseñanza presencial debe ser la de los alumnos más pequeños. Esto es así por dos razones.

Primero, por sus necesidades de atención, que son mucho más exigentes que las de los mayores: no tienen la autonomía ni la madurez suficientes, como es natural, para aprovechar de manera adecuada las clases online. Este último trimestre nos ha servido de prueba para ello, y el rendimiento ha sido muy diferente para unas edades y otras.

Segundo, como hemos dicho antes, por lo difícil que resulta esa necesidad de atención para las familias. Cuanto menor es el niño más se agudiza el problema, pero es evidente que los más pequeños no solo no pueden aprender online de forma autónoma, sino que en muchos casos (sobre todo en Educación Infantil) el problema no es solamente académico: son niños que, simplemente, no pueden estar solos.

Por estas dos razones, en esas circunstancias los alumnos de Educación Infantil y Primaria dispondrán de todo el espacio para ellos, mientras que los mayores asistirán a clases remotas como han hecho este trimestre, ya que han funcionado extraordinariamente bien. Al poder utilizar tantos espacios para los pequeños será perfectamente factible dividirlos en grupos con un máximo de diez alumnos y distanciarlos adecuadamente.

La principal dificultad en este caso no es tanto logística sino económica: no solo es necesario ampliar espacios, sino también personal. En nuestro Colegio pondremos, naturalmente, el bienestar de nuestros alumnos por encima de cualquier otra consideración, y eso supondrá un aumento inevitable en el gasto durante el curso escolar.

Finalmente, hay un aspecto en el que la enseñanza online simplemente no funciona: los exámenes. Es imposible garantizar la integridad durante las pruebas con nota sin hacer de esas pruebas algo muy desagradable para los alumnos honestos (que son la mayoría). Por esa razón, lo más razonable es que incluso en un escenario con los alumnos pequeños en el Colegio nuestra intención es la asistencia física de los mayores de manera puntual para realizar pruebas escritas.

Con todo ello intentaremos conseguir ese triple propósito tan difícil: no poner en riesgo a niños ni adultos, evitar que se resienta el ritmo de aprendizaje de los alumnos, y liberar a las familias de los pequeños de la atención constante que requieren.

Al tratarse de una situación inédita, somos desde luego conscientes de que surgirán imprevistos y no todo saldrá como deseamos. Por esa razón también es esencial nuestra flexibilidad y capacidad de adaptación a circunstancias cambiantes y a veces muy confusas. Debemos saber gestionarlas con cabeza, y proporcionar a las familias tranquilidad y la seguridad de que el interés de sus hijos es nuestra prioridad fundamental.

 

Dimas Mazarro (Director). Colegio Nuestra Señora Santa María. Colegio privado de educación mixta personalizada desde los 2 años hasta la universidad. Zona Conde Orgaz y Arturo Soría. Ronda de Sobradiel, 80. 28043. Madrid.